La fotografía

FOTOGRAFÍA EN LA PREHISTORIA

Los inicios de la fotografía datan del “Mierdolítico”, etapa de la prehistoria caracterizada por el uso de excrementos de animales para construir diversos utensilios.
Uno de nuestros antepasados perteneciente a esta etapa, el “hombre de ñordenthal” (παλαιός, ñordo=mierda, y λίθος, enthal=sexual), utilizaba excrementos de pokemon secados al Sol y endurecidos con betún de Judea para fabricar sus propios juguetes sexuales.
Estos homínidos vivían en cuevas llamadas “cuartos oscuros”, donde experimentaban con sus juguetes antes de lanzarlos al mercado.

Una de las teorías, según el científico Alexander Restrepeda (catedrático de brisca por la universidad del Topo), postula que en algún momento, durante una prueba rutinaria y al no estar seca del todo una de las mierdas, el ñordenthal sale del cuarto oscuro embadurnado del viscoso elemento, quedando plasmada su imagen en una piedra al intentar rascarse los cataplines en la misma.

Por otra parte, el doctor Anselmo Rosenpollen (fallera de honor 1985) apunta que todo es debido a un Agujero de Gusano en el Plano Ficticio, teniendo su origen en las islas japonesas de Ryukyu. Vórtice espaciotemporal que, según el doctor Rosenpollen, lanzaría a más de un millón de japoneses, con cámara incluída, directamente al Mierdolítico.


LA FOTOGRAFÍA VS RELIGIÓN

Otra teoría, formulada por un grupo de frailes y teólogos de la Universidad de la Cascaruja, afirma que la fotografía moderna nació en Jerusalén a las (17:45 D.C.).
Un famoso titiritero llamado Adolfo Gutiérrez, más conocido por su nombre artístico (Jesucristo) con el que firmaba sus prolíficas performances, murió durante uno de sus espectáculos por la conservación del escarabajo pelotero del Teide.
José de Arimatea, un morboso de la época, quiso tener un recuerdo del momento, así que tendió una sábana sobre el cadáver y lo calcó por encima con témperas Hobby.
A día de hoy, hay miles de fotocopias distribuidas por diversas iglesias del mundo de esa primigenia fotografía, gracias a un correo en cadena que mandó el mismísimo Papa Clemente I.

FOTOGRAFÍA MODERNA

Pero la fotografía moderna no alcanzó su plenitud hasta la invención del “flash”. Este dispositivo, inventado (un día DC Comics) por el físico nuclear William Camuñas, marcó un hito en el mundo fotográfico.
Este dispositivo está formado por iones de avestruz enroscados por fusión tibia a neutrinos de la sombra de las piernas de Jesse Owens. Todo el conjunto, almacenado previamente en un tupperware, es introducido a presión por un orificio nasal de un tío con leotardos.
Nace así el primer “flash” operativo para cámara fotográfica estándar. Estos dispositivos se anclaban mediante imanes de nevera a las cámaras, siendo así de fácil manejo para el usuario.

Su funcionamiento es sencillo. Al accionar el diafragma, perfectamente sincronizado con este, el tío con leotardos sale disparado hacia la persona fotografiada y le prende un mechero en la cara. Rápidamente, antes de cerrarse el diafragma, el tío con leotardos se vuelve a anclar en la cámara con los imanes de nevera y está listo para la siguiente foto.

Pero este invento solo funcionaba con personas. En 1871, el matemático Anacardo Bélmez formuló una ecuación para demostrar que Los Reyes son los padres. Tras quedarse sin papel se dispuso a escribir el final de su ecuación en la pared de la cocina antes de que se le olvidara. Pero al fotografiar esa parte de la ecuación en una cocina tan lúgubre, ya que tenía que adjuntar documento gráfico para presentar en la oficina de patentes, tuvo que utilizar el flash. Ahí se dio cuenta de la precariedad del invento, ya que el tío con leotardos no reconocía una cara e intentaba alumbrar más de cerca con el mechero quemando el final de la ecuación y dejándola irreconocible.
En lugar de esta, apareció la cara de aquel titiritero llamado Jesucristo, lo que instó a Anacardo Bélmez a formular otra teoría.
“Si utilizas flash en una pared, Jesucristo son los padres”

A día de hoy, pocos son los cambios que ha sufrido la fotografía, no obstante, el flash ha ido evolucionando con las nuevas tecnologías. De todos es sabido que cámaras de fotos, móviles y videocámaras ya utilizan el flash de nueva generación. Lejos de aquel deficiente flash primigenio que no acertaba a reconocer caras con un mechero, ahora disponemos de flash de alta potencia. Un tío con leotardos portando una antorcha y anclado a la cámara con velcro.